Monday 28 March 2011

Los oficios de la cultura




Este sábado pusieron en La 2 este programa dedicado a la traducción. No sé yo si plantear todo el tema desde una universidad privada es un buen comienzo. Eso sí, si yo fuese la universitaria sobre la que gira todo el programa, me dedicaba a la interpretación como actriz más que a la de lenguas o a la audiovisual, porque vaya actuación más natural XD

Wednesday 23 March 2011

¿Existen las palabras que no aparecen en los diccionarios?

Le agradezco que me haga esa pregunta:
Un diccionario es algo más que un registro léxico acompañado de definiciones. En el de la RAE no sólo la mano derecha es “La que corresponde al lado del cuerpo opuesto a aquel en que el hombre siente latir el corazón”, sino que la mano izquierda  es “La que corresponde al lado opuesto al de la derecha” (toma, toma y toma). El amor se define como “Sentimiento intenso del ser humano que, partiendo de su propia insuficiencia, necesita y busca el encuentro y unión con otro ser”. Me pongo a temblar sólo con que Pérez-Reverte (el hombre “cojones”) ratifique estas definiciones y con que en el organismo sólo haya tres miembras*. Bueno, y del que definió amor ya ni hablamos…


A su vez, y dándole la vuelta a la tortilla española, un diccionario es un documento en el que se incluye un léxico normativamente aceptado y se olvida todo el resto, que no es poco. Esta también es claramente una elección ideológica con métodos ideológicamente establecidos.
Por otro lado, se cae habitualmente en el craso error de tildar de incorrectas aquellas palabras que no aparecen en tan benemérita obra. Y no es que tenga yo nada en contra de los directores de Cifras y Letras, pero es obvio que todas las palabras existen estén o no en el diccionario bendito. No se dejen engañar por ninguna institución y tengan en cuenta de nuevo que el contexto y el cliente son los que mandan.
En este artículo Javier López Facal arroja un poco de luz a este monolito normativo que es el DRAE.
¡Manos en alto por don Manuel Seco!

*Si hubiera más mujeres seguro que no tendría que poner en cursiva la palabra que más revuelo ha traído a este país de borricos, con perdón a los que no lo son o no se consideran asnos.

Wednesday 16 March 2011

Bombero a tus zapatos

"Ya, ya lo sé, es una chorrada, pero ya saben ustedes que estas cosas me sacan…" de quicio continúo yo. Tan incrustado está en el inconsciente colectivo, (si tal engendro existe) que el que sabe un idioma es capaz de traducir que a veces gente por otro lado realmente educada mete patas como dejar fuera de la ecuación de la traducción a los traductores. Ya, ya lo sé, es lo de siempre y allá cada cual con sus mensajes, pero van tres esta semana. Arqueólogos que me piden que eche un vistazo a una traducción de google "para que no suene a indio" (sonaba a neandertal), publicistas que se atreven con las del inglés al castellano (no os quiero contar el resultado), etc.

Yo no me canso de sonreír con educación, explicar y en último término y si no atienden a razones señalar algún error de peso en el "resultado". Mantengo la fe de que en algún momento entrarán en razón y buscarán a un traductor como quien busca a un contable para hacer la declaración, un arquitecto para diseñarles una casa o a un abogado para defenderles ante un abuso.

Sobre el blog enlazado: Cuaderno de campo es una delicia para los que disfrutan de la naturaleza, sobre todo como espectadores (que es como se debería disfrutar siempre, claro). Tiene entradas sobre pájaros y chapucillas de alta y baja tecnología tremendas y una serie de cámaras instaladas en comederos y bebederos que da gusto.

Monday 7 March 2011

Encuesta APTIC de tarifas

Hace ya un mes que se publicó esta encuesta, pero hasta hace poco que no he podido encontrar tiempo para leerla; y sinceramente me ha parecido (como traductor español en el extranjero) cuanto menos interesante para saber cómo tarifican sus servicios un considerable número de traductores que principalmente están afincados en España. A parte de poder observar las medias por idioma, también es sugestiva la media de facturación por mes del gremio, en función de los años de experiencia, incluyendo el mes más bajo y el mes más alto de uno de los encuestados de cada grupo.

Ojo también a los máximos y mínimos muestrales de las tarifas por idioma, que, como comentan en la encuesta y como animamos en el Calco desde nuestra activa membresía del No Peanuts Movement!, deberían servir, respectivamente, de ejemplos a seguir y a evitar en nuestras prácticas profesionales.

Tuesday 1 March 2011

El ordenador

A raíz de esta entrada de Pablo Muñoz me he acordado de que la configuración de mi ordenador es la caña.

Trabajo en plantilla pero tengo mucha libertad para quedarme a trabajar desde casa y a veces desde mi pueblo o desde mi pueblo de adopción. Nada más entrar en la empresa me dieron el portátil así que no pasé por el problema de elegir un sobremesa o no. Para mí, que había trabajado sólo con sobremesas, era un martirio tanto el teclado como la pantalla, así que en cuanto quedó una libre me la apropié, otra ya la tenía en casa, y un teclado en condiciones. Este es mi espacio de trabajo:



Lo que se ve:

El ordenador es el de la empresa para la que trabajo. Un Compaq todoterreno que me ha reconciliado con los portátiles después de abominar de ellos durante muchos años. No es extremadamente potente, pero da la talla cuando tengo que trabajar en la memoria de traducción o retocar gráficos grandes. Eso sí, tiene suficiente potencia gráfica como para poder conectarle un periférico básico: la pantalla adicional.

El monitor extra conectado al portátil es el mejor hallazgo que hice al poco de llegar a la empresa. Antes ni se me había ocurrido, ni a mí ni a nadie de los que trabajaban allí con unos portátiles de quince pulgadas, pero tres años después ya no hay nadie en la oficina que no se haya adueñado de una pantalla huérfana. Incluso muchos se han comprado pantallones para sus respectivas casas. Volver a graduar unas gafas cuesta más que una pantalla tengo entendido. El teclado no es una maravilla pero me obliga a levantar las muñecas y me las deja en una posición más o menos cómoda. Me gusta más el que tengo en la oficina porque es más rápido, pero acabo más dolido, la verdad. La silla es deliciosa.


Lo que no se ve:

Después de pasar por el brete de perder toda la información de un ordenador hice la del nabo y me propuse no volver a perder un archivo nunca jamás. Además de un ordenador adicional de sobremesa armado y en perfecto estado de funcionamiento por si falla el portátil, tengo conectado un disco duro al router en el que se actualiza una copia de todos los archivos de mi ordenador sin que yo mueva un dedo. Sweet*. Peeero, el problema es que mi piso está encima de una falla tectónica y si se hunde el chiringuito, (o entra un ladrón y se lleva todo lo que hay dentro, no me tachen de catastrofista), todo el equipo se va al garete al mismo tiempo. Para eso también está el SyncBack Freeware conectado a un servidor ftp para los archivos que de ninguna manera quiero perder por ninguna de las razones.

En cuanto aprenda configuraré el ordenador de mi madre (a 2.000 km nada menos, viva el siglo XXI) para que funcione con wake-on-lan y haga las funciones de servidor de bajo consumo y poder guardar más archivos que los que me permite mi servicio de hosting.

Por último, en las macetas de fuera tengo judías, tomates y lechugas para descargarme de la presión del curro. Todo cuenta.

Pásense por la discusión de Pablo que esté la mar de interesante


* Mi señora lo tiene mejor todavía porque utiliza el Time capsule con el Time Machine en su Mac, esa gente sí que sabe hacer programas.
**** Foto de mi comentario JCG ****